Sacrificó el caballo

Autor:  Padre Justo López Melús

 

 

Anwar tenía un hermoso caballo. Era famoso en todo el Turquestán. Todos lo codiciaban, pero Anwar no quería venderlo. Anwar era muy rico, pero el caballo era su principal tesoro. Su amigo Yakub era tratante de caballos, y se había encaprichado con el caballo de Anwar. Pero Anwar no quería desprenderse de él por nada del mundo.

Un día la fortuna de Anwar quebró, y de nuevo le visitó Yakub. Anwar lo acogió con la tradicional hospitalidad de Oriente y se vio obligado a obsequiarlo con la comida más exquisita. Cuando Yakub le expresó el motivo de su visita, Anwar le dijo: «Ya no podemos hablar sobre el caballo. No tenía nada que ofrecerte y lo sacrifiqué para obsequiarte». La hospitalidad había tenido prioridad sobre la pobreza. Antes quedarse sin nada que dejar de obsequiar al huésped.