Las palabras

Autor: Kary Rojas 

 

Hace poco escuché: "Dios nos dio una boca y dos oídos, para que  habláramos menos y escucháramos más"... 

Hay muchísimas palabras que se dicen de mil formas y que causan variados efectos en los demás; una sola palabra puede devolver las ganas de vivir; una sola palabra puede matar o destruir...
Hay palabras que se dicen y no se olvidan, quedan grabadas, tal vez porque nos invitaron a soñar, o quizás porque nos hicieron llorar... 
hay otras que se escriben, se inmortalizan en el papel, pasan de generación y generación, logrando que muchos las puedan leer...

Hay a quienes les gusta hablar mucho y no se miden en lo que dicen; no piensan en lo que pueden ocasionar con sus palabras; y algunos tal vez se arrepienten, y quisieran retroceder el tiempo para no decir lo que dijeron; porque con ello hirieron... pero muchas de esas veces es demasiado tarde; cuando se ocasiona daño en el corazón humano, no es fácil volverlo a dejar igual; se necesita de demasiado amor para dar y así sanar...

Hablamos sin pensar en lo que decimos, se habla muchas veces por aparentar, ocultar alguna verdad, y por lo general el que más habla, poco sabe escuchar... 
Se puede hablar también para aconsejar, animar, acompañar, consolar, 
fortalecer, expresar amor, llenar de luz un corazón...
Hay palabras que iluminan y dan vida; hay otras que matan y dejan el alma destruida... 

Piensa muy bien lo que vas a decir o a escribir; reflexiona si tal vez te gustaría que te dijeran lo mismo; trata de escuchar claramente, antes de hablar... recuerda que lo que digas o escribas, no lo puedes echar atrás... 

Las palabras surgen mayor efecto, con la fuerza que pone el corazón... y aunque sean palabras que alguna vez otros pronunciaron, no significan lo mismo, depende de quien las haya expresado... 
Se dicen palabras repetidas, muchas veces sin saber lo que realmente quieren contar; y hasta se inventan otras que logren expresar, lo que es realmente amar.

Son muchos los que hoy sufren por alguna palabra que recibió, o por otra que se le negó... hay quienes lloran porque nadie les dijo: Te Amo... otros porque cuando lo quisieron decir, ya no estaban los oídos que soñaron algún día con haberlo escuchado... 
Y tu, si tienes algo que decir; piénsalo muy bien... si crees que con ello puedes hacer feliz, no tardes mucho en atrevértelo a decir; pero si no estás seguro de lo que puedes ocasionar, medítalo bien, no sea que vayas a herir a alguien y hagas llorar... 

Muchas veces queremos decir mil cosas y no encontramos las palabras que lo logren expresar...

En lo personal son muchas las palabras que me hacen feliz, aquellas que me demuestran que creen en mí, también las que surgen como eco a lo que en letras quiero decir; sueño con escuchar las palabras de las personas que amo y que no se encuentran a mi lado, aquellas que al cielo se han y doy otras que ya no caminan por mi mismo camino...

Me gustan las palabras que expresan en sí mismo lo que no es fácil decir; otras que con solo pensarlas o escribirlas dentro de mí, me hacen soñar y me llenan de fuerzas de luchar...

Mi mayor sueño es que las palabras que escribo, en el papel se logren inmortalizar; para que por siempre cuenten al mundo lo que el Amor de Dios ha hecho en mí y la paz que a mi alma sabe dar... 

¿Y tu, qué quieres decir o que quieres escuchar?